lunes, 31 de enero de 2011

Centinelas de occidente

Occidente, con su líder ,EE.UU., a la cabeza es extraordinariamente celoso de que se cumplan los requisitos que caracterizan a lo que los propios estamentos dirigentes, que sólo a veces coinciden con los gobiernos, occidentales consideran la democracia....excepto...si existen circunstancias que puedan alterar la estructura de dominio estratégico mundial que nosotros, los comunistas, sin ningun género de dudas, identificamos con la fase superior del capitalismo: El Imperialismo.
Durante el periodo inmediatamente posterior a la II Guerra Mundial, el enemigo, ese fantasma que recorría el mundo, lo constituía el otro lado del telón de acero, el bloque de paises que, con mayor o menor acierto, estaban empeñados en la construcción del Socialismo, con la Unión Soviética a la cabeza. Para minimizar, y en muchos casos neutralizar, en las sociedades occidentales, el ejemplo de las sociedades del socialismo real, el Imperialismo potenció la socialdemocracia, es decir los partidos políticos sociológicamente ubicados en la izquierda herederos de aquellos que tras la Revolución de Octubre se negaron a romper con las formas de dominación burguesa, para establecer el sistema de capitalismo renano o estado de bienestar, básicamente consistente en obtener una decente calidad de vida y cobertura social para los trabajadores de esas sociedades occidentales, a costa de la explotación inmisericorde de recursos humanos y naturales de las sociedades menos desarrolladas, lo que vino a llamarse, de forma a mi juicio incorrecta, el Tercer Mundo. En estas sociedades, que me cuesta llamar tercermundistas, muchas de ellas en proceso, casi siempre por la fuerza, de alcanzar la independencia política, la socialdemocracia tradicional no tenía papel alguno a jugar puesto que el avanzar hacia ese Estado de Bienestar de las sociedades occidentales avanzadas, que bien podríamos definir claramente como imperialistas, suponía la lucha por el obtener el control de sus propios recursos materiales y humanos. Eso decantó, en un mundo dividido en dos sistemas sociales radicalmente contrapuestos, a que la gran mayoría de los movimientos de liberación nacional se situaran en la órbita política de la Unión Soviética y sus aliados. Entre otras cosas, y este es un dato a retener, porque la URSS y sus aliados siempre prestaron ayuda a estos movimientos emancipatorios, en detrimento de su propio bienestar, algo que a largo plazo contribuyó a su caida. Dicho de otra manera, parece evidente que un obrero sueco vivía mejor, incluso muchísimo mejor, que un obrero soviético. Pero no se olvide, que, por ejemplo, la guerra de Vietnam puede que hubiera tenido otro resultado sin la ayuda, que aunque solo fuera material fue muchísima, prestada por la URSS al Vietcong. La Revolución Cubana sufre el mayor de los rigores de la agresión imperialista, a unas pocas millas, desde la desaparición de la URSS. En el resultado de la invasión norteamericana en Playa Girón, para algunos bahia de cochinos, cochinos extraordinarios dice el canto, decretada por el añorado demócrata norteamericano John F. Kennedy, mucho tuvo que ver la existencia de la URSS. Sin poder utilizar la socialdemocracia como Caballo de Troya del movimiento obrero, el Imperialismo no ha dudado en prescindir de sus principios, presuntamente, democráticos, para asegurarse de que los paises en vías de desarrollo iban a seguir estando precisamente ahí en vías de desarrollo hasta el fin de los tiempos. La existencia de las dinastías Somoza y Duvalier, de Pérez Jiménez, Odría, Trujillo, Stroessner...etc, el indisimulado protagonismo de la CIA en el asesinato de Salvador Allende a manos de los esbirros de Pinochet, solo se explican a la luz del apoyo implícito o explícito del Imperialismo. Estos ejemplos de Latinoamérica son extrapolables a otros lugares del mundo con alguna caracterización diferencial. Así al avance en Afganistán de las fuerzas más progresistas y laicas, encabezadas por el comunista Babrak Karmal, el Imperialismo respondió, jugando al aprendiz de brujo, potenciando y armando fuerzas reaccionarias yihadistas y, nunca mejor dicho, de aquellos polvos vienen estos lodos.
El norte de África no podía ser una excepción, y allí se instalarón toda suerte sátrapas dictadorzuelos desde los alahuíes reyes de Marruecos hasta Hosni Mubarak, enterrador de todo lo que tuvo de progresista y emancipador el Nasserismo y garante muy principal de la política genocida del Estado de Israel.
Estos centinelas de occidente norteafricanos estan pasando por dificultades, y tras la caida del tunecino Ben Alí, que hace más de treinta años derrocó, declarándole incompetente y senil, al adalid de la independencia Habib Burguiba, parece que Mubarak, el más mimado gendarme imperialista de la zona, no está en su mejor momento. Y Occidente se preocupa, aunque la Unión Europea ni está ni se le espera, y se preocupa con razón, ahora no es el fantasma del comunismo su principal amenaza. El vacío de poder que produce la caida de estos dictadores y la inexistencia de una izquierda política, que ya se encargaron los propios occidentales de de neutralizar, produce un escenario en el que toda suerte de fundamentalismos religiosos ,que fácil, y si se quiere demagógicamente, pueden identificar opresión y miseria con Occidente, se mueven como pez en el agua. No es tontería la amenaza.

domingo, 30 de enero de 2011

Enfocando

El Espía Otomano opina:
Cargado de razón está don Bolche, responsable de esta bitácora, cuando manifiesta que no le gusta el decreto que aprobó el Consejo de Ministros, y nadie más que el Consejo de Ministros, por el cual se introducen importantes recortes en derechos esenciales de los trabajadores. Es cierto, y hay mucha gente a quien no le ha gustado, entre ellos a muchísimos afiliados a CCOO, que se ha producido una negociación que ha atemperado las fortísimas agresiones que producían las intenciones iniciales del gobierno, probablemente el gobierno más reaccionario y neoliberal, a juicio de este espía, desde la muerte del dictador, incluidos los presididos por el neofascista Aznar. Pero desenfocan su punto de mira aquellos que focalizan sus ataques en CCOO, porque no es Toxo quien decreta lo que decreta el Gobierno de España. Le parece a este espía que hay quien, desde un infantilismo izquierdista muy bien caracterizado por Lenin, se suma alegremente a las campañas antisindicales de origen más que conocido. Es fácil, y demagógico, acusar a los sindicatos de clase, y aquí siempre me refiero a CCOO, sin perjuicio de que pueda haber otros, porque es el sindicato de referencia de los comunistas, y es a los comunistas a los que mas espío y ausculto. Y hacen gala los comunistas de una extraordinaria, y acertadísima, prudencia a la hora de valorar el papel de CCOO en el proceso, al manifestar, al mismo tiempo, su desacuerdo con el decreto gubernamental y su respeto a CCOO, respeto que les permite, dada su obligada condición de afiliados a CCOO, manifestar sus posiciones políticas y sindicales allí donde estén presentes. Y esa acción política, no tiene nada que ver con estrategias chapuceras que algunos hacen equivaler al llamado entrismo trotsquista. Si los comunistas, como algunos visionarios pretenden, abandonaran CCOO, para ubicarse en CGT, que es un sindicato respetabílisimo pero de origen e ideología anarco-sindicalista estarían cometiendo el error que ya cometieron en los años treinta, bajo la dirección comunmente considerada como sectaria de Bullejos, Adame y Trilla, fundando la CGTU. Focalícese el enemigo que es el Gobierno de España, y no CCOO. Me parece a mi.

jueves, 27 de enero de 2011

No me gusta

No tengo conocimiento de la letra del acuerdo alcanzado ayer por el Gobierno de España y los sindicatos de clase mayoritarios pero sé que no me gusta. No me gusta por lo que significa. No me gusta porque certifica una derrota, que no se produjo, el 29-S al no retirarse la agresiva, además de inútil, reforma que nos impuso el Gobierno de España. No me gusta porque certifica la congelación de las pensiones, y la bajada de salarios a los empleados públicos. No me gusta porque no mueve ni un milímetro las posiciones reaccionarias y neoliberales del Gobierno de España. No me gusta, en definitiva, porque da un paso atrás en el camino que parecían haber tomado las direcciones sindicales, camino de reivindicación y lucha, para volver a la senda del acuerdo, sea el que sea, para seguir intentando convertir las organizaciones de defensa de los derechos de los trabajadores en empresas de servicios que igual gestionan un seguro de vida que el alquiler de un apartamento en Torrevieja. No me gusta. A los comunistas no nos gusta, y a la mayor parte de Izquierda Unida tampoco. En esta tesitura, ¿Qué hacer?. Podriamos tirar por la calle del medio, echarnos al monte. Cometeríamos un error de grandes proporciones si promovieramos o alentaramos una ruptura irreversible en CCOO, pero eso no puede significar que renunciemos a nuestras posiciones políticas, defenderemos allí donde tengamos presencia política, dentro y fuera de CCOO:
- Nuestro firme rechazo a la reforma del sistema público de pensiones
- Nuestra oposicón a la reforma laboral decretada en junio de 2010 y a cualquier intento del Gobierno de España de negociar la reforma de las pensiones con cesiones en ella. La reforma laboral debe ser derogada
- Rechazamos la propuesta de reforma de la negociación colectiva y muy especialmente la eliminación de la ultractividad, es decir la extensión de la aplicación de las clausulas normativas del convenio colectivo más allá más allá de la fecha prevista para la vigencia del convenio si no hay otro convenio que lo sustituya, y la individualización de las relaciones laborales.
-Impulsaremos todas aquellas plataformas unitarias encaminadas a construir una alternativa política y social.
Todo ello desde nuestro respeto a CC.OO., sindicato de referencia de los comunistas, al que trasladaremos nuestra crítica posición política.

lunes, 24 de enero de 2011

Parece que fue ayer

Parece que fue ayer, los trabajadores carecían de los más elementales instrumentos para defender sus derechos. La extrema derecha, esa que hoy se cobija bajo el paraguas del Partido Popular, milagrosamente democratizada, descargo su furia sobre quien sabía que podía amenazar sus privilegios de clase. Porque aquel fue un crimen de clase. Y quien defendía a los trabajadores, a la clase obrera, eran los comunistas y CC.OO. Treinta y cuatro años después hay conquistas, logradas con lucha, sacrificio y sangre, que vuelven a estar en peligro. Parce que fue ayer. Hoy la patronal no manda sus pistoleros, no le hace falta, tiene otros métodos para agredir a los trabajadores, métodos que disfraza con bonitos eufemismos: consenso, acuerdo, concertación, negociación, dialogo....
Cada vez que aceptamos un solo recorte en derechos de los trabajadores largamente peleados estamos asesinando de nuevo a Luis Javier, Serafín, Ángel, Enrique y Javier.
Tras años de cierto desconcierto, los comunistas tenemos claro que la lucha de clases es el eje de nuestra acción política. Y esa es la acción política que tenemos que defender tanto en nuestro sindicato de referencia, CC.OO, como en nuestro principal movimiento sociopolítico estratégico, Izquierda Unida. Y defenderemos esa política con firmeza, pero sin desesperación. Conocemos sobradamente la correlación de fuerzas dentro de CC.OO, tenemos muy presente lo ajustado del resultado del último Congreso Confederal. Sabemos la influencia que conservan los sectores afines a los últimos secretarios generales, pero tenemos la determinación de romper nada. Nada sería peor para los trabajadores que una confrontación rupturista en CC.OO. Tendremos que recuperar influencia en base a nuestro trabajo militante coordinado, a nuestra firmeza política cohesionada. La voz de los comunistas, tanto en CC.OO. como en IU, tiene que ser una y solo una. Estoy seguro de que los que ayer, parece que fue ayer, dieron su vida, hoy estarian de acuerdo. No basta con invocarles, hay que mirarse en su ejemplo.

miércoles, 19 de enero de 2011

De estreno cibernético



En Izquierda Unida de Alpedrete estamos de estreno, estrenamos página web. Hasta ahora nos habíamos movido un tanto domésticamente, con una especie de bitácora, ahora damos un salto que, esperamos, ha de ser de gran utilidad en el reto que hemos lanzado, tanto a la ciudadanía de Alpedrete como a nosotros mismos. Tenemos que cambiar la manera secular, que viene de siglos, de hacer las cosas. Tenemos que romper una dinámica que, con agotador aire cansino, da sistemáticamente por inmutable el que el caciquismo, unas veces paternalista y otras, las más, abiertamente especulador y chapucero, es el eje principal de la acción política institucional. Y ese cambio, por razones obvias, solo se se puede dar desde la izquierda, pero no cualquier izquierda. Y un instrumento útil, así lo creemos, ha de ser nuestra página. Decimos que el necesario cambio, ese que nos acerque al siglo XXI, Alpedrete, su segmento más conservador, asume con dificultad la Constitución vigente, no puede hacerse desde cualquier izquierda, y lo decimos con plena conciencia de lo que decimos. No podemos considerar como pertenecientes a la izquierda, porque actuan sensu contrario, a aquellos que, por acción u omisión, avalan políticas alejadas de los intereses de los trabajadores. Políticas que hoy está ejecutando el Gobierno de España, pero que también, descendiendo a nuestra escala serrana, ejecuta el alcalde, elegido en las listas del PSOE, de la población más importante de la sierra de Guadarrama, Collado-Villalba. Todo ello procurando ser respetuoso con los difíciles momentos que está atravesando la Agrupación Socialista de Alpedrete. No nos hemos inmiscuido en asuntos internos de otro partido, y no vamos a hacerlo en ningún momento.
Tenemos discurso propio, un discurso que compartimos, en gran medida con otras fuerzas políticas y sociales de la izquierda alpedreteña, con Los Verdes con los que ya acudimos en 2007 y con un conjunto de ciudadanos de Alpedrete, ideológicamente progresistas, de diversa procedencia, movimientos ciudadanos, republicanos, ambientalistas o ecologistas, etc que se agrupan en la Alternativa Ciudadana de Alpedrete . Con estos mimbres, excelentes mimbres, aspiramos a hacer la cesta, llena de principios radicalmente democráticos, que nos permita dar un vuelco a la vida política y social de Alpedrete. Y no somos falsamente optimistas cuando decimos que podemos conseguirlo. Podemos conseguirlo trabajando sin mirar a otros, planteando nuestras alternativas, construyendo, entre todos, un programa desde la izquierda y para la izquierda.

martes, 18 de enero de 2011

TDT Party

Otros han dado llamarlo Carajillo Party, buscando paralelismos con la organización neofascista norteamericana Tea Party, autora moral e intelectual de los sucesos de Tucson, Arizona. Bromas aparte, el análisis del espectro audiovisual tras el apagón analógico, en la Comunidad de Madrid, ofrece resultados francamente preocupantes. Desde mi Alpedrete sintonizo 7Veo de Pedrojota, Canal 10, con Curry Valenzuela como estrella mediática, Popular TV y Canal 13, concesionarias de Radio Bonete, en la actualidad llamada COPE, Telemadrid y La Otra, portavoces oficiales, sostenidos por dinero público, del PP madrileño, con una Isabel San Sebastián que asusta y por último, la estrella, Intereconomía con diversos Aquelarres disfrazados de tertulias, entre las que destaca El Gato al Agua con una amplia nómina de supuestos periodistas, o colaboradores, dificilmente encuadrables, incluso, en la derecha más extremista, Federico Quevedo, macarrilla con aspiraciones intelectuales, Carlos Dávila, si supiera juntar las letras con algún sentido podría pasar por periodista, Roman Cendoya, chulillo que se cree gracioso, Eduardo García Serrano, maleducado oficial, hijo del escritor falangista Rafael García Serrano autor de guiones cinematográficos tan edificantes como la fiel infantería, Cristina Alberdi, ¡que lástima!, Pablo Castellanos, ¡que pena! y ¡que lástima!, Joaquín Leguina, ¡que repugnancia!, ¡que asco!, ¡que naúseas!, Javier Nart, que piensa de si mismo que es progresista, que inmenso error, Mario Conde, delincuente convicto, Alfonso Rojo desconocedor de los principios básicos de la deontología profesional, Alejo Vidal Quadras, que en otro tiempo se llamó Aleix, y no sigo porque la nómina es extensísima. Suele participar en estos debates, francamente no sé con que objeto Antonio Miguel Carmona portavoz de economía del PSM-PSOE. He llegado a pensar que este destacado socialista madrileño, uno de los más firmes apoyos de Tomás Gómez acude a estas tertulias en cumplimiento de una promesa, como aquellos devotos de los años cincuenta que iban descalzos, y a veces marcha atrás, caminando hasta el Cerro de los Ángeles porque a su hijo se le había curado el garrotillo. estos son los canales generadores de opinión tras la deserción de PRISA cerrando CNN+ . Lo demás, refritos de series americanas, los dos canales de La Sexta y Nitro, de Antena 3, de series españolas, FDF, o repeticiones, con fuerte despliegue de gritos y alaridos, de programas-basura destinados a mostrarnos las miserias de Belén Esteban, o cualquier otro personaje tan insustancial, analfabeto y anodino como esta señora, Pogo como excepción al Canal 8, del productor cinematográfico y presidente testimonial del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo que tiene como oferta básica el cine, principalmente español.
En estas condiciones alguien puede tener el valor de afirmar que en España hay libertad de expresión. Yo no.

lunes, 17 de enero de 2011

La que se avecina

El Espia Otomano opina:
Uso, en el título de la entrada, el de una serie de Tele5, que ahora emite su subsidiaria FDF y que es un descarado autoplagio de una de éxito en Antena3, Aquí no hay quien viva. Y a fe que he dudado entre usar un título y otro, porque lo que se avecina es que aquí no haya quien viva. Y ustedes, mis queridos españoles, parecen en la inopia. Bueno, no todos, porque mi anfitrión don Bolche alterna una actitud entre meditabaja y cabizbunda con un rictus de cabreo oceánico, al que, todo hay que decirlo, no es ajeno el magro resultado obtenido por su equipo en Almeria y del que hace responsable en exclusiva, de forma a mi juicio injusta, al señor Pérez Lasa. El trencilla fue una calamidad pero su equipo no estuvo a la altura, me parece a mi. Pero no es para hablar de furbol, Ángel María Villar dixit, para lo que he abierto esta entrada, ni tampoco de las tribulaciones futboleras de don Bolche, además ojalá fueran exclusivamente sus preocupaciones. Otras cosas le preocupan mucho más.
Para este espía la huelga general del 29-S fue un éxito, incluso un éxito notable, si se tenía en cuenta que durante un periodo demasiado largo, la mayoría de la izquierda política, el PSOE y una parte importante de IU, habían abandonado toda acción política fuera de los marcos institucionales, mientras que la izquierda social, los sindicatos de clase, había abjurado de forma absoluta de la lucha de clases para entrar de lleno en lograr concertaciones y acuerdos a toda costa, aún a riesgo de descafeinar su carácter de organizaciones representativas de una clase social, la clase trabajadora, y nunca del conjunto de la sociedad, entre otras cosas porque conciliar los intereses de empresarios y trabajadores, de explotadores y explotados es imposible y su intento conduce, en cualquier caso, al sindicato vertical, del que los españoles con edad y memoria tienen triste recuerdo. En ese escenario producido por muchos años de desidia y pacto, la movilización de muchos millones de trabajadores, aunque no todos hicieran huelga sensu strictu era un éxito, pero era un éxito si, y sólo si, la izquierda política y sindical profundizaba por ese camino de movilización, resistencia y lucha. Ángel Cappa, un excelente entrenador argentino de fútbol, además de una persona con la cabeza muy bien amueblada distingue entre dos deportes, el atletismo y el futbol, por la caracterización que dan los deportistas a su forma de correr. Para el corredor atlético, da igual si lo es de los 100 metros o de la maratón, la carrera lleva al objetivo final, la meta, mientras que para el futbolista la carrera hasta el balón, en la que consume cansancio igual que lo haría el corredor de atletismo, marca la llegada al comienzo de su verdadera tarea, el conseguir que ese balón avance, interactuando con sus compañeros o en solitario, hasta llegar al marco rival. Los sindicatos, a la luz de la rumorología destada que tiene todo el aspecto de ser verdadera, parecen comportarse como el corredor de atletismo, que una vez atravesada la meta se deja llevar por la inercia esperando recibir su cosecha de aplausos, y si ha lugar las medallas y laureles, mientras que la izquierda política, de la que desde ahora mismo, y a estos efectos, descuelgo a la mayoría del PSOE, fundamentalmente a su dirección, debe actuar como el futbolista y prepararse para jugar con el balón, en este caso la huelga del 29-S. En el informe político del Comité Central del PCM, que espié con gran interes se dice:
Ante esta situación, tanto el Partido Comunista, como Izquierda Unida, deben responder con la contundencia de sus propuestas políticas y la necesaria movilización de sus militantes y organizaciones(...)para la cual el Partido Comunista de Madrid debe desplegar una una fuerte campaña de información sobre el alcance, ahora real, de la reforma laboral y el peligro de una reforma de las pensiones que suponga el retraso de la edad de jubilación.
La aparente disposición de las direcciones sindicales a volver a la senda, senda indefectiblemente condenada al fracaso, de la concertación y el consenso, vuelve a dejar a IU, y lógicamente al PCE que forma parte inseparable de ella, en solitario en el camino de la movilización y la lucha. Por ello, más incluso que por los resultados futboleros, sin minimizar en absoluto el peso que estos puedan tener en su estado de ánimo, anda don Bolche cariacontecido, porque no puede evitar la sensación de que se está desandando una vereda que costó mucho recorrer desde que con la elección de Cayo Lara Izquierda Unida apostó, claramente, por la necesidad de la Huelga General cuando las direeciones sindicales, ni de lejos, estaban por la labor. Sin embargo, sin intentar quitar importancia a la preocupación de Bolche, sin caer en un optimismo voluntarista que conduce a poco, este espía considera que el paso dado por muchos trabajadores en el camino de la movilización, no es fácilmente reversible, y en ese escenario político tiene la izquierda política, IU, que al fin y al cabo es la única que actúa como tal, tiene que moverse. No es fácil, pero no debería dejarse arrastrar por el desánimo.

miércoles, 12 de enero de 2011

Aniversario de Mundo Obrero

8o años, nada más y nada menos, cumple Mundo Obrero, nuestro querido Mundo Obrero. Los que tenemos una determinada edad caemos, irremediablemente, sin querer, sin poder evitarlo, en la nostalgia, quizás porque en el fondo lo que añoramos es nuestra juventud, esa juventud que nos hacía capaces de superar el miedo, y era mucho ese miedo, a la hora de distribuir Mundo Obrero, Órgano Central del Partido Comunista de España, decía debajo de la mancheta, mientras en la parte superior rezaba la máxima que los comunistas nunca debemos olvidar :Proletarios de todos los países, ¡Uníos!, y es que para los comunistas la lucha contra las reformas que quiere imponernos el PSOE está intímamente ligada, por ejemplo, a la que llevan los mineros de Johannesburgo. Se leía Mundo Obrero , ya lo creo que se leía, se leía en las fábricas y los tajos, se leía en las facultades e institutos, y también en los billares, locales que ejercían la función de centros de reunión juveniles, y se cobraba, creo que el último precio clandestino fue de 10 pta, y lo pagaban trabajadores y estudiantes conscientes del valor que tenían ese par de duros, acaso tres. Luego vino la legalización y... , en fin, esa es otra historia.
Ahora tenemos la obligación de relanzar nuestro querido Mundo Obrero

martes, 11 de enero de 2011

Espiando

El Espia otomano opina:
Dos noticias sacudieron ayer el panorama informativo de mis espiados, una de ellas de muchísimo más transcendencia y calado que la otra, puesto que esta última: la designación de Jose Mourinho como mejor entrenador de 2010, en un acto en el que se designaron, igualmente, a Marta y Messi como mejores jugadores del mismo periodo, no deja de ser una noticia que concierne al ámbito deportivo, siempre considerando al fútbol, que ya es considerar, como una actividad deportiva. Con todo, el reconocimiento al portugués ha desatado, sobre todo en los medios del nacional-papanatismo un furor que ha conseguido despertar los fantasmas de la "persecución antiespañola" echándole leña al fuego que el premio al mejor jugador no fuera a parar al chavalillo manchego que consiguió el gol, un tanto de churro, con el que el fervor patrio se desató el verano pasado. Tengo el mayor de los reconocimientos para Vicente del Bosque con un curriculum impresionante que incluye ligas y copas de Europa con su equipo de siempre, que no se portó bien con él todo hay que decirlo. Solo una frustrante experiencia, precisamente en Turquía, empalidece, muy levemente, el historial de este auténtico caballero del fútbol. Pero ello no resta merecimiento alguno al actual entrenador blanco.
Es la segunda noticia, el último comunicado de ETA, la que, de verdad, tuvo ayer auténtico fuste. De los muchos análisis que se han hecho me quedo, sin duda alguna, con la que hace Rafael García Almazán desde su Kabila . Excepto cuando habla de fútbol tiene este hombre una más que notable capacidad de análisis y en este caso pone el dedo en la llaga: Si lo que se busca es una rendición incondicional de lo que queda de ETA, que no creo que sea demasiado, si lo que se espera es una rendición como la de Vercingetorix, si se desea una reedición de las horcas caudinas, en definitiva si lo que se busca es la victoria el final de la violencia se antoja lejano a ojos de este espia. Siempre habrá un puñado de iluminados capaces de sembrar el terror aún a sabiendas de que su destino próximo es la cárcel, en el mejor de los casos. No deberían los españoles dejar el proceso que ha de llevar al final de la violencia en manos de los partidarios de una victoria militar incontestable. Todo a ello pesar de que la suicida, además de criminal, opción de ETA de fulminar un proceso en el que la mayoría de la sociedad española puso grandes esperanzas, ha fortalecido las posiciones más intransigentes. Si triunfa el talibanismo de Mayor Oreja el final estará, y lo estará siempre, lejano

sábado, 8 de enero de 2011

Madrlleños por Madrid

Soy madrileño, madridista y comunista. Me siento orgulloso de serlo, y mi personalidad sería difícilmente comprensible, y en cualquier caso no es fácil, sin contemplar estas tres condiciones.
El ser comunista es una opción ideológica de combate, de busqueda de una sociedad mejor, es una manifestación de responsabilidad: no me basta con descalificar esta sociedad capitalista, tengo que tener, necesito para moverme, una alternativa, y necesito que sea posible; el asalto al Palacio de Invierno, la Larga Marcha, los barbudos entrando en La Habana o la guerra de Vietnam, me dicen que tomar el poder es posible, más allá de los obstáculos, más o menos sutiles, más o menos ocultos, que nos ponga el enemigo de clase, y la parodia que es este sistema disfrazado de democracia que padecemos, "el peor si exceptuamos todos los demás" nos repiten machaconamente intentando llegar a convencernos, no es el menor de ellos. El como gestionar ese poder una vez tomado es otra cuestión. Creo haber tomado nota de errores cometidos, aunque se me escapen algunos.
El ser madridista es casi una conclusión estética de lo anterior, podría ser perfectamente del Barça, el Milan o el Manchester United, pero nunca seguidor de un equipo que haya interiorizado la derrota como un valor, disfrazándola de solidaridad con los perdedores desheredados del mundo. Toda mi solidaridad combatiente y militante con los pobres y desheredados del mundo, pero sólo con aquellos que quieren, sin importar medios, dejar de serlo. Tengo muchísimas diferencias con el pensmiento cristiano básico, aún sin contaminar por la estructura llamada Iglesia Católica, pero aquello de Bienaventurados los mansos porque ellos poseerán la tierra consigue sacarme de mis casillas.
Y madrileño soy porque lo siento. Como lo sentía mi padre que había nacido en Fuentemolinos, Burgos. Y me siento profundamente madrileño, madrileño de mi Alpedrete, por más que Esperanza Aguirre y María Casado, mi alcaldesa, intenten que me avergüence de ello.
Hemos pasado por una fiestas caracterizadas por la elegancia social del regalo. Para quien me conoce en mi triple vertiente ya comentada, el regalarme es fácil, bastan libros o música (los mecanismos electrónicos tambien me apasionan) para que sea feliz como una perdiz. Y he comenzado a leer uno de mis regalos, Madrid bajo la dictadura (1947-1959) de Pedro Montoliú y me está enganchando, y está creciendo mi orgullo de madrileño.
Fue Madrid, capital de la República, una de las ciudades, y con ella sus ciudadanos, que sufrió con más inquina la represión franquista. No fue ajeno a este furor represivo, el hecho incontestable de que Madrid, los madrileños hubieran nacido donde hubieran nacido, resistieron como nadie, durante tres años, el asedio del fascismo. Y solo merced a una infame traición, en la que, desde luego, no participaron los comunistas, pudo Franco con sus moros, falangistas y requetés pisar suelo madrileño. Y desde luego no fue Madrid una ciudad que gustara al dictadorzuelo de origen gallego. De hecho barajó la posibilidad de retirarle la capitalidad. Nunca el carácter madrileño, alegre y abierto, casó bien con la tristeza cruel del Caudillo de voz atiplada. ¿Alguien puede imaginárselo en Pasapoga? Imposible. Ni siquiera es posible imaginarlo echando un polvo con la Collares enredándose en los ídem.
Con todo contiuaron los madrileños resistiendo. Y ahí va un dato, para mí hasta ahora desconocido, lo he sabido por el libro a que hago referencia líneas arriba. Referéndum, Ley de Sucesión, 1947. Porcentaje de votos afirmativos en el conjunto de España: 92%. Porcentaje en Madrid:60 %.
No todos pueden decir lo mismo.

lunes, 3 de enero de 2011

Las familias, sus familias

El espía otomano opina:
Desde que mi paisano Mustapha Kemal Atatürk, impuso, y le costó lo suyo, un estado laico sobre lo que fue el Imperio Otomano, para sus compatriotas quedaron claras las diferencias entre las instituciones del Estado y las estructuras religiosas. Y aunque, sería absurdo negarlo, los movimientos de corte islamista van ganando influencia política, podemos decir que el Estado turco es básicamente laico, por más que su población practique, mayoritariamente, la religión musulmana, y este espía, estaría en condiciones de afirmar, que en ese aumento, paulatino, de la influencia islamista, alguna responsabilidad tiene el occidente cristiano. El régimen anterior, que para unos fue una dictadura fascista, absolutamente homologable con los regímenes de Mussolini y Hitler, lo cual igualaría a los camisas azules falangistas a los asesinos de las SS, y para otros un sistema totalitario militar sin más ideología, tuvo una característica en la que unos y otros coinciden: el nacional-catolicismo. La religión católica impregnó todo el entramado jurídico del franquismo con la misma intensidad que las suras del Corán impregnan las leyes de multitud de estados islámicos, siendo su paradigma Arabia Saudí, como antaño impregnaron el Imperio Otomano hasta la irrupción de los Jóvenes Turcos. Tras la muerte del dictador comenzó el aparente, sólo aparente, desmantelamiento del franquismo, y de hecho una de las familias de UCD, encabezada por Alberto Estella Goytre y de la que eran destacados miembros los diputados José Luis del Valle, José Ramón Arboledas y otros que no recuerdo dieron en denominarse como Jóvenes Turcos teniendo relativa importancia por su apoyo táctico a los críticos encabezados por Óscar Alzaga y Miguel Herrero Rodríguez de Miñón, en el fracaso de Adolfo Suárez en el Congreso de Palma de Mallorca de UCD. Estos Jóvenes Turcos "ucedeos" puede que tuvieran éxito, la tuvieron, en la conspiración Anti-Adolfo, pero como desmanteladores del nacional-catolicismo fracasaron espantósamente, en lo que a los privilegios de la Iglesia Católica se refiere. Prueba evidente de este fracaso es la propia Constitución de 1978 que confiere al Estado un carácter aconfesional, que no laico, con mención expresa al Iglesia Católica, y a ninguna otra, y la existencia de algo tan anacrónico como un Concordato que sólo mantienen en el mundo unos pocos paises.
Cada intento de normalizar la separación de la Iglesia Católica y el Estado, es considerado casus belli por lo más reaccionario, y me atrevería a decir, siempre desde la óptica otomana, más anticristiano del catolicismo español, que encabezado por la propia jerarquía episcopal tiene su brazo secular en el llamado Movimiento Neocatecumenal que tiene como principal impulsor al peculiar pintor, su atentado artístico en la catedral de la Almudena le define suficientemente, Kiko Argüello, lo que les hace ser conocidos, popularmente, como los kikos. A lo largo del calendario, estos intolerantes conciudadanos de ustedes, los españoles, convocan toda serie eventos reivindicando que su forma de ver las relaciones entre los ciudadanos libres, es decir las relaciones sociales, afectivas y sexuales, tiene que ser la única que el Estado considere como legítima y legal. Y si no se hace así, llevando su intolerancia al paroxismo, consideran que se está atacando a su modelo. El colmo de los colmos. Si yo considero que un familia puede estar compuesta por dos personas del mismo sexo y unos hijos que hayan adoptado, por ejemplo, resulta que estoy atacando a su modelo de familia, que tiene, necesariamente, que estar compuesta por un hombre, una mujer y los hijos que hayan engendrado biológicamente mediante un coito. ¡Pero si yo a esa forma de convivencia también la considero una familia! ¿Dónde está el ataque? ¿Dónde la indefensión de ese tipo de familia, digamos, tradicional?.
Con tan irracional planteamiento nos castigaron con una misa de la familia, reivindicante de su modelo de familia como único posible, el domingo 2 de enero, con no demasiada afluencia, apenas unos pocos miles movilizados desde todo el orbe cristiano.
Son ustedes, los españoles, muy libres de hacer lo que quieran, pero a juicio de este espía si no se liberan de una vez de la inmiscusión de la Iglesia Católica en asuntos propios del Estado, jamás alcazaran una mínima calidad democrática. Luego llegado el caso, se ponen como motos a quemar iglesias, y ese no es, ni ha sido nunca, el camino adecuado. Deberían poner, sin estridencias, a la Iglesia Católica en su sitio. Claro que yo soy otomano y bastante tengo con intentar parar a mis propios integristas.

domingo, 2 de enero de 2011

Reflexión para empezar el año

En alguna de sus novelas de la serie Carvalho, el siempre, para mi, presente Manolo Vázquez Montalbán, consideraba el 1 de enero como un día inexistente, un día por el que había que transitar a duras penas como víctima de una cruel resaca producto de los excesos en honor del último día del año, la Nochevieja. Durante muchos, muchísimos, años así fue para mí. Con el agravante de que en mi casa paterna este inexistente 1 de enero era, también, día de comida y cena familiar, lo que le convertía en un día torturante. Con el cambio que supuso en mi vida el abandonar algunos hábitos que podríamos considerar como tóxicos, el 1 de enero dejó de tener el carácter resacoso-torturante, pero, más allá de comenzarlo, indefectiblemente, con el Concierto de Año nuevo desde Viena, el 1 de enero siguió teniendo la consideración de día destinado a no hacer nada, o, peor, a aplastarse en un sofá delante de la TV teniendo como principal actividad el cambiar de canal, el zapping. Y abusando del mando a distancia, ayer 1 de enero, en un canal que apenas uso, veo7 que creo propiedad de Pedrojota me enganché a una especie de miniserie, protagonizada por George C. Scott, en el papel de Benito Mussolini. Y el enganche a continuado hasta hoy, 2 de enero, de hecho me he planteado esta reflexión, y me he puesto a escribir sobre ella, al final de la película. Porque no voy, no soy quien ni tengo capacidades para ello, ha valorar la calidad de la miniserie, la reflexión me la ha provocado el final. Un partisano con absoluta frialdad dispara sobre la pareja Mussolini-Petacci, no le tiembla el pulso.
¿Justifico la acción del partisano?
Sí.
¿Hubiera podido yo hacer lo mismo?
Creo que sí.
¿Me hubiera temblado el pulso?
Creo que no.
Posteriormente ¿Hubiera tenido algún cargo de conciencia?
No lo sé, pero creo que no.
¿Puedo seguir manteniendo mi oposición a la pena de muerte como un valor ético absoluto?
...¿¿¿¿????....
Fin de la reflexión, se admiten sugerencias aunque no se asegura que se haga caso de lo sugerido.