Jugar contra el filial

Recuerdo aquellos tiempos, en que uno prestaba servicio, adscrito a la escala de complemento, en las Fuerzas Armadas. Estaba yo en Zaragoza, y generalmente venía los fines de semana a Madrid, pero era inevitable que algún fin de semana que otro me tocara servicio, evidentemente los profesionales se reservaban los fines de semana libres y los servicios los hacíamos los eventuales. Dado que tenía un cierto enchufe con el Tte. Coronel, conseguí del furriel de mando que al menos me quedaran libres los fines de semana que mi equipo jugara en casa. Se sorprendió el muchacho, el furriel, cuando le pedí que me cambiara un servicio un miércoles a un sábado, y no era para menos, pero tanto él, como el Tte. Coronel que me dió permiso para venir a Madrid lo comprendieron enseguida, iba a producirse en el estadio Bernabeu un hecho insólito iba a jugar el Madrid la final de Copa del Rey contra sí mismo, puesto que su filial, el Castilla, después de haber eliminado a grandes equipos de primera, creo que el Sporting de Gijón y el Atheltic de Bilbao entre otros, había llegado a la final. Fue un partido muy emotivo, por primera vez en la historia, la práctica totalidad del Bernabeu iba en contra de su equipo y animamos a aquel Castilla en que jugaban Agustín, Gallego, Chendo, Pineda y otros que no llegaron a cuajar en el primer equipo pero sí en primera división, como Paco, Cidón, etc. Y nos sentó muy mal a los madridistas que se ensañaran endosándoles un 6-1 a los chavales. Aquel precedente sirvió para que la RFEF prohibiera el enfrentamiento en competición oficial de un equipo con su filial.
Pues bien, aquella prohibición ayer se violó, y se adulteró la competición en el campo que hay junto al rio Manzanares. De nuevo un equipo vapuleó a su filial llevándole a un ridículo dificilmente repetible. La hazaña de los indios chusma, tribu expulsada de la gran nación india por eso, por chusma, ante nuestros rivales de la Ciudad Condal, pasará a la historia del recochineo en letras de oro. Don Imperialista no tuvo que tirarle a Cerezo su butaca de abonado, pues lo que quería es lo que se produjo ayer, el Barça ganará la liga merced a su lamentable colaboración, y nos quedaremos otro año sin títulos, a diferencia de ustedes que han quedado como campeones de sinceridad retratándose como lo que han sido, son y serán un pestiño de equipo, con una afición que presume ser la mejor del mundo mientras disfruta viendo como sus colores son abochornados y humillados. Nunca tantos, hicieron tanto el ridículo, durante tanto tiempo (Del futuro himno del At. Madrid que nunca escribirá Sabina).