miércoles, 20 de marzo de 2013

Los Cien mil hijos de San Luis en Chipre

El espía otomano opina:
Para un otomano medianamente informado Chipre no es, ni mucho menos, un desconocido. Es más, Chipre existía, antes de la creación de la UE, incluso antes del Tratado de Roma , aunque sea dificil de comprender para esos papanatas que creen firmemente que antes de creación de la Comunidad del Carbón y del Acero (CECA) Europa no existía. Existía, ya lo creo  que existía, y tenía instituciones políticas, ya lo creo que las ha tenido ¿Que fue sino el Congreso de Viena? Una especie de UE del siglo XIX que tenía como objetivo la preservación del absolutismo mundial y reforzaba el papel de las potencias centrales, muy significativamente. Los cien mil hijos de San Luis , que al mando del duque de Angulema acaban con el trienio liberal en España, no son sino el brazo armado de esa institución.
Chipre, que durante siglos formó parte del glorioso Imperio Otomano, hasta que la desgracia y el infortunio le hicieron caer bajo dominio británico, tambien ha tenido sus Tres hijos de San Merkel, la troika comunitaria, pero se ha rebelado, y este espia se felicita por ello.
Sin entrar en si era, que probablemente lo era,  un paraiso fiscal, aunque no el único, ni siquiera el más importante, en el que la mafia rusa blanqueaba sus dineros (En Suiza, Luxemburgo, Lichtenstein, Islas del canal, etc, lo blanquean otros) la rebelión chipriota, ya veremos hasta donde llega, es motivo de esperanza, al menos para este espia

lunes, 11 de marzo de 2013

Fuego amigo

Grabé, por lo que he tenido la posibilidad de verla más de una vez, la entrevista que hicieron a Cayo Lara en La Sexta la noche del sábado y, con legítimo orgullo, tengo que felicitar a mi coordinador general que supo salir con dignidad, y en algunos momentos con brillantez, del encuentro con siete personas, si incluimos al presentador, seis de las cuales eran periodistas además de nuestra antigua compañera Inés Sabanés, persona por la que, más allá de discrepancias políticas, guardo un sincero afecto. Ninguna de las preguntas, absolutamente ninguna, fue de las que pudieramos considerar de viento a favor, ni siquiera hubo preguntas neutrales. Me pareció evidente, y era lógico, que Cayo llevaba preparada, la más que probable intervención de Francisco Marhuenda, director de La Razón, sobre las finanzas de IUCM, al fín y al cabo es cuestión a la que su diario ha dado máxima cobertura, por más que, como bien explicó Cayo, se trata de un problema que arrastramos desde el año 2000 y si se ha resucitado ahora no es casual. Marhuenda preguntó, Cayo respondió, nada que objetar. Tampoco me causó extrañeza la agresividad, verbal por supuesto, del que fue director del antiguo periódico deportivo del Movimiento Nacional, Eduardo Inda, actual responsable de investigación, o algo parecido, de El Mundo, participante en multitud de tertulias, tantas que llevó a Jordi Évole a preguntarle que de donde sacaba tiempo para investigar, cuestión que no quedó resuelta. Intentó el señor Inda por todos los medios, creo que con escaso éxito, poner a la misma altura una posible prevaricación, que de confirmarse habrá de ser castigada, ¡faltaría más!, por trocear un contrato, para evitar un concurso público, práctica habitual aunque condenable, con el mayúsculo escándalo que está suponiendo la financiación del PP. Más allá de si se declararon a Hacienda o no, posibles ingresos suplementarios a dirigentes, lo realmente importante es saber quien y porqué dió tan enormes sumas de dinero en concepto de donaciones al Partido Popular. Es como si quisieramos poner al mismo nivel el robo de una cartera, con un asalto a mano armada, sin que nadie deje de considerar el robo de una cartera como un delito. No está de más recordar que el señor Inda es licenciado en periodismo por la Universidad de Navarra, por lo que su animadversión hacia la izquierda es natural. Estuvo en su papel. Ni siquiera me extrañó que Ernesto Ekáizer insistiera en la posible incoherencia de IU en Extremadura , nunca ha ocultado este periodista su simpatía, aunque a veces muy crítica, por la socialdemocracia. Y un escenario futuro con IU apoyando, o incluso participando en él, a un gobierno socialdemócrata estoy seguro de que sería de su agrado, por lo que la situación extremeña le chirría un tanto. Quizás la pregunta que más me desconcertó fue la de Inés porque parecía proceder de alguien que desconociera el interior de IU pidiendo una especie de censo de simpatizantes para que estos pudieran intervenir más directamente en IU. Como si la ex-compañera hubiera olvidado que uno de los mayores problemas que ha tenido que resolver IUCM ha sido aclarar sus censos, ¡como para hacer un censo de simpatizantes!
Los ingenuos que crean que La Sexta es un medio de izquierda, que son los mismos, aproximadamente, que en su día creyeron que lo era ELPAIS se deberán dar cuenta  de que los medios de comunicación son empresas privadas, empresas que sienten sus intereses amenazados por una fuerza como IU, pero no por el PSOE.
Debemos estar preparados: a medida que crezcamos en influencia la beligerancia de los medios va a ser mayor. Tenemos que estar preparados. Es imprescindible que nos preparemos.

viernes, 8 de marzo de 2013

El régimen

Últimamente oigo hablar mucho del régimen, de la crisis el régimen y del proceso constituyente que finiquitará el régimen. En la almodovariana Mujeres al borde de un ataque de nervios, la portera del inmueble, personaje interpretado por Chus Lampreave, se queja amargamente de la limitación que le supone, por su condición de testiga de Jeovah, el tener que decir siempre la verdad. A los marxistas, salvando la distancia que me separa de tan extraordinaria actriz, nos ocurre casi lo mismo al tener la obligación de analizar científicamente la situación. ¿A qué régimen  se refieren aquellos que continuamente lo citan, caracterizando su crisis y augurando su futura desaparición? ¿Dónde está ese poder popular que, a juicio de algunos compañeros, se está construyendo en estos momentos?
Durante el franquismo, el sistema económico del capitalismo monopolista de estado estaba caracterizado políticamente por la ausencia absoluta de libertades, reales y formales, por una represión feroz. Era lo que se llamaba el régimen del 18 de julio. El propio sistema económico vigente, el capitalismo, necesitó hacer evolucionar su caracterización política, para asegurarse su supervivencia, de manera que tras un proceso constituyente que conocemos como la Transición desembocamos en un régimen de monarquía parlamentaria, con libertades, al menos las formales de reunión, asociación y manifestación, aseguradas. En mis cincuenta y siete años de vida son los dos regímenes que yo he conocido, con un único sistema de dominación de clase, el capitalismo. Desde esa perspectiva, y a mi es a lo que me suena, se puede perfectamente sustituir  el régimen, la monarquía parlamentaria, por otro régimen, la República, presidencialista o parlamentaria, sin afectar significativamente a la esencia del sistema, la dominación capitalista, y ello podría hacerse, perfectamente, a través de un proceso constituyente en el que la burguesía monopolista tuviera una correlación de fuerzas favorable. Yo, desde luego, no estoy en esa estrategia, y no es que sea yo un dogmático fundamentalista partidario de un PCE, modelo Bullejos, ¡Abajo la República Burguesa! ¡Vivan los soviets!, ignorando el importante, y positivo, giro político y estratégico que dieron al Partido Pepe Díaz y Dolores, aunque desde el Partido haya quien quiera, equivocadamente, plantear esa dialéctica de forma artificial. El contexto sociopolítico de los años 30 en España, poco tiene que ver con el actual. Entonces, el sistema económico era el propio de una sociedad que, a pesar de varios intentos, no había conseguido llevar a buen puerto una revolución burguesa que sentara las bases del capitalismo moderno, de manera que, exceptuando Cataluña y el País Vasco , la estructura económica de España, era esencialmente agrícola, alternando  regiones basadas en el latifundio, en muchas ocasiones con un aprovechamiento no óptimo, con regiones de minifundismo miserable. Entonces, el cambio de régimen, aun hegemonizado, en gran medida, por la burguesía progresista, era un innegable avance muy significativo en aspectos como la educación, el acceso a la cultura, la influencia de la Iglesia, etc, y la lectura que hizo el grupo dirigente del Partido, claramente equivocada. Hoy puede que el vigente régimen de monarquía parlamentaria esté en crisis, no hay duda de que lo está el bipartidismo sagastacanovista, pero lo importante es que la crisis, así la definimos siempre, es una crisis sistémica, es decir del sistema de producción capitalista, por eso nuestra estrategia debe orientarse hacia el cambio de sistema, no hacia un simple cambio de régimen. Y claro que en ese proceso será imprescindible un Proceso Constituyente, pero para que sea favorable a nuestros intereses, ese proceso habrá de darse con una correlación de fuerzas igualmente favorable. Pongamos un ejemplo: La Transición fue un Proceso Constituyente, pero como se dió con una desfavorable correlación de fuerzas, el resultado no fue el mejor posible. Y hoy, y quien no lo vea así confunde realidad y deseo y cae en voluntarismo idealista, absolutamente ajeno al análisis marxista, la correlación de fuerzas sigue siendo desfavorable. Indudablemente hay un segmento de la sociedad que ha comenzado a moverse, nadie puede negarlo, y se trata de un elemento positivo, aunque aún insuficiente, en que los comunistas tenemos un importante trabajo a realizar: Tenemos que dotar a todos esos movimientos, mareas, indignaciones, etc de contenido político para que avancen hacia una solución de carácter socialista. Y tenemos que hacerlo presentándonos como somos, como comunistas, no disolviéndonos en ellos. Es, a mi juicio, preocupante, esa cierta clandestinidad con la que parecen actuar algunos compañeros y camaradas, sin que ello suponga caer en el dogmatismo o la imposición. Pero además de dotar de contenido político a los movimientos que se producen, hemos de tener en cuenta que para cambiar el sentido de la correlalción de fuerzas, tiene que ser muchísima más gente, fundamentalmente trabajadores, la que se movilice, la que perciba nuestros programas, propuestas y estrategias como serias, factibles y razonables. Cuando la mayoría de la clase trabajadora nos perciba como lo que debemos ser, su parte más consciente, podremos aspirar a cambiar las reglas del juego.
Por último, me gustaría detenerme brevemente en la construcción del poder popular. En estos momentos es una leyenda urbana, una consigna más o menos acertada, y de consignas acertadas o ingeniosas está el cementerio empedrado, el mayo del 68 generó unas cuantas docenas, pero el sistema capitalista sólo empezó a resentirse cuando la CGT( francesa, claro) convocó la Huelga General  y la mayoría de la clase trabajadora la secundó. Lo demás vuelve a ser idealismo puro y duro, vuelve a ser confundir realidad y deseo.

miércoles, 6 de marzo de 2013

Semana Grande

El espía otomano opina:
La muerte del comandante Chávez borró anoche la cara de felicidad incontenible que tenía el dueño de esta bitácora al finalizar el Manchester United- R. Madrid. Por eso va a ser este espía, que presume de conocerlo muy bien, sobre todo en lo que a fútbol se refiere, el que comente estos felices días de invierno. Como por otra parte, siempre refiriéndonos al fútbol, nuestros gustos y opiniones son en gran medida coincidentes no parece ser una tarea en exceso complicada.
Llevan los madridistas un temporada compleja y convulsa que no ha correspondido a las expectativas creadas en la temporada anterior. Todo el mundo daba por hecho que esta iba a ser una temporada tranquila en lo local con un Barça en retirada tras la marcha de Guardiola. Y el primer torneo de la temporada, la Supercopa así parecía avalarlo. Error, y grave. Los blancos comenzaron la liga con una melopea importante, producto a mi juicio de varios factores. Una pretemporada insuficientemente consistente y sin incorporaciones de reseñar, el fichaje más importante Modric no la hizo y se ha notado a lo largo de lo que llevamos de temporada. Una importante serie de bajas Lass Diarra, Sahin, Granero que han afectado al centro del campo, un centro del campo, en su aspecto creativo, excesivamente dependiente de Xabi Alonso, que no ha estado a su mejor nivel. Aparecieron las lesiones en jugadores importantes como Marcelo, Pepe y más recientemente Casillas. También hay que reseñar una cierta indolencia o prepotencia de una parte de la plantilla junto a la baja forma de jugadores importantes como Di Maria, Higuaín o Benzema con un Kaká siempre bipolar. Sólo un CR7 que podríamos calificar de imperial, el mejor jugador, en estos momentos de la Liga Española (no tengo conocimiento suficiente del resto de las Ligas del mundo), ha sujetado al equipo. Y eso le califica como jugador histórico, un jugador con capacidad de echarse un equipo a los hombros, como Maradona, Cruyff, Pelé o Di Stéfano. Y si alguen echa en falta a Leo Messi sepa que es una omisión perfectamente justificada. A juicio de este espía, que algún partido de fútbol ha visto en su vida, el argentino es un jugador excepcional, probablemente el mejor con el balón en los pies, pero con un físico que no le acompaña, aunque la sobreprotección arbitral le ayude, y sobre todo con la necesidad imperiosa de que el equipo se ajuste a sus necesidades. Tampoco Mourinho ha estado, a mi humilde entender, demasiado afortunado provocando algún incendio innecesario. En ese estado de cosas, con derrotas en Getafe y todas las de Andalucia, dos de Sevilla, Granada y Málaga, se ha plantado el Madrid en dos eliminatorias que no empezaron bien. En la Copa contra el Barça y en la de Europa contra el Manchester United, con idéntico resultado en el partido de ida en el Bernabeu,1-1. Todo parecía encaminarse hacia la catástrofe, sin embargo el gran Madrid se presentó inopinadamente. En el Camp Nou desarboló a un desconocido Barça y en Old Traford épica remontada un tanto oscurecida por la, a mi juicio, excesivamente rigurosa expulsión de un jugador inglés, aunque estoy seguro de que el resultado hubiera sido el mismo sin esa circunstancia. En el medio, el sábado pasado, un inmenso tostón Madrid-Barça que los blancos salvaron con facilidad a pesar de las voces que ven penalty en un infumable piscinazo de Adriano. En definitiva una semana grande para el madridismo que, una vez perdida la la liga, salvo catástrofe impensable, tiene todavía muchas cosas que decir.

Con respeto Hasta Siempre

Cuando estábamos inmersos en el proceso que hoy llamamos pomposamente La Transición,  y que nos llevó de un sistema capitalista carente de libertades formales a un sistema capitalista con derecho al pataleo, militaba este aspirante a aprendiz de bolchevique en el ala más ortodoxamente prosoviética del comunismo español el PCE (VIII-IX). No me arrepiento, en absoluto, de aquella militancia, todo lo contrario, me enorgullezco de ella, me permitió no escuchar nunca los cantos de sirena del eurocomunismo, y me impregné de valores que me han acompañado a lo largo de mi vida, muchos de los cuales echo de menos. En definitiva aprendí mucho. En aquellos años 70, despues de morir el dictador, y siendo aún ilegales, puesto que la legalización de los comunistas fue solo para los del PCE oficial, instalabamos un puesto en la cabecera del Rastro madrileño, al lado de la estatua de Cascorro, en el que además
de difundir Mundo Obrero (Con mancheta en rojo) vendiamos insignias, pegatinas y carteles. Era una actividad que tenía un cierto carácter deportivo, y muchos domingos acababan con carreras y enfrentamientos con bandas fascistas que no veían con buenos ojos nuestra actividad y que contaban con la abierta complicidad de la policía (entonces un cuerpo militar que recibía el nombre de policia armada). En una ocasión pusimos a a la venta unos posters con Ernesto Che Guevara y otros con Fidel Castro. Un veterano camarada curtido en mil batallas nos sugirió, y en aquellos tiempos para un joven comunista una sugerencia de un veterano era más que una orden, más o menos como ahora , O tempora, o mores!, que retiraramos los carteles con la imagen de Fidel y dejaramos los del Che. Naturalmente preguntamos, con el debido respeto, al camarada en cuestión las razones por las que nos hacía esa sugerencia. Porque Fidel está vivo, respondió, y a continuación desgranó una lista de revolucionaros que habían dejado de serlo pasando, a su juicio, a ser merecedores de engrosar el estercolero de la historia. He procurado siempre seguir ese consejo, que me pareció entonces y me parece ahora, sabio y prudente, de modo que siempre, o casi siempre, he manifestado mi adhesión a los procesos, sin hacer excesivas referencias a las personas, bien se trate de la Revolución Cubana o de la Bolivariana.
Ayer falleció Hugo Chávez, una muerte esperada pero no por ello menos dolorosa. A mi, al menos me ha dolido. Chávez era un hombre que podía caer bien o mal, pero desde luego a nadie dejaba indeferente. Incluso sus más acérrimos detractores tienen que reconocer que su aparición en la escena política produjo un cambio sustancial en América Latina, que retomó el sueño de la Revolución Cubana de aspirar a librarse de la tutela del Imperio del Norte. La Revolución Bolivariana, en su todavía corta vida ha tenido importantes logros , logros sistemáticamente ignorados por la prensa libre que han intentado, y en el caso de España conseguido en gran medida, presentar a Chávez como el cásico milico golpista, olvidando los innumerables procesos electorales, reconocidos como limpios por todas las instancias internacionales, en los que se impuso a toda clase de candidatos que se presentaban con el único programa de derrotarle. En ese contexto de difamación, de distorsión de la realidad no es de extrañar la popularidad de aque extemporáneo ¿Porqué no te callas? lanzado por alguien con tan pocas virtudes morales como el jefe del estado español, cuando el venezolano se quejaba de claras intromisiones en un intento de golpe de estado. Ninguno de los muy demócratas detractores de Hugo Chávez hace nunca referencia a la situación de Venezuela, que sería extrapolable a gran parte de la América Latina, antes de la llegada del comandante, una sociedad hegemonizada por una burguesía ociosa, y sé que hay honrosas excepciones, que se limitaba a disfrutar de las riquezas naturales muy abundantes, y singularmente del petróleo, sin preocuparse de generar la más mínima infraestructura y condenando a la pobreza e indigencia a la gran mayoría de la sociedad, una mayoría que por no tener no tenía, en muchos casos, ni derecho al sufragio. Es esa mayoría la que hoy sustenta el proceso revolucionario. Esa burguesía inútil, patrocinadora de una economía hiperdependiente de los Estados Unidos, dió lugar a un sistema político sagastacanovista que alternataba corrupción con corruptela copeis con adecos o adecos con copeis,  tanto monta monta tanto. Sé de sobra que no todo es idílico, de manera que el Partido Comunista de Venezuela decidió quedarse fuera del proceso que dió lugar al Partido Socialista Unido de Venezuela si bien apoya el proceso revolucionario en su conjunto.
Tengo la plena confianza de que el proceso revolucionario venezolano seguirá adelante, como seguirá en Bolivia, Ecuador o Nicaragua, es más tengo la plena confianza de que se irá extendiendo por toda América el territorio libre de imperialismo.
Con todo el respeto, desde el dolor.
¡HASTA SIEMPRE COMANDANTE!