jueves, 14 de agosto de 2008

Cap.2 El Tunel del tiempo

Abandonar El Continente para adentrarse en el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte es como viajar en el tiempo, unos cincuenta años, como poco, hacia atrás cuando la idea de una Europa políticamente unida era casi algo de visionarios, y sólo se vislumbraba una cierta unidad económica entre Francia, Alemania, Italia y el Benelux. Para los británicos de entonces, muy crecidos por su victoria en la reciente guerra, cuando una tormenta sobre el canal de la Mancha interrumpía las comunicaciones era El Continente el que quedaba aislado. Hoy las cosas no han cambiado de forma sustancial, acrecentada la situación por la imperialista imposición, por parte de sus primos del otro lado del océano, de su idioma, al que todo el mundo, sin que nadie se escandalice, llama inglés y no británico o reinounidense, como lengua franca, con la anuente postura papanatista de los no angloparlantes, muy particularmente de los dirigentes de la República Francesa. Que un idioma con un léxico más pobre que el maorí, y apurando un poco que el de los chiflidos de la Gomera, que una jerga, llamarlo idioma es exagerar, basada en el uso de cuatro verbos, generalmente en infinitivo acompañado de ésta o aquella partícula modificativa, y seis, acaso siete, preposiciones, adjetivos o adverbios que modifican los escasos sustantivos, y más escasos aún verbos, que conforman su paupérrimo vocabulario, se esté convirtiendo, degraciadamente lo es ya, en el mecanismo oral y escrito de transmisión de ideas y conceptos de de uso común, dice muy poco de las ideas y conceptos a transmitir. No me imagino que hubiera sido de la humanidad si el Imperio Romano, en lugar de imponer el latín (del que descienden los únicos idiomas que justifican la calificación del homo sapiens sapiens como ser racional) se hubieran plegado a cualquiera de las múltiples bárbaras vocinglerías propias de los no menos bárbaros habitantes de fuera de los confines del mundo civilizado.

Pero habíamos quedado en el capítulo anterior en tener que resolver el problema que se nos presentaba por el hecho de no haber previsto que la comunicación entre Bretaña y Normandía, dos regiones al fin y al cabo limítrofes, fuese tan absolutamente complicada, aunque mi extrañeza no estaría en absoluto justificada si hubiera tenido en cuenta que hace unos cuantos años, no sé si las cosas habrán cambiado, pretendí hacer un viaje en tren (y tenía que ser en tren y de la RENFE que me resultaba gratuito) desde Viveiro (Lugo) hasta Santander, es decir atravesar Asturias y poco más, y la alternativa era de locos, puesto que tenía que bajar hasta Venta de Baños (Palencia) para conseguir subir hacia Cantabria. Estando ya en Roscoff, ciudad que insisto que no corresponde a ningún lugar de la, por mi, añorada URSS, hicimos las gestiones necesarias para cambiar el billete de vuelta, de manera que retornaramos igualmente que nos ibamos. cambiamos el billete, pero a costa de introducir una incertidumbre, puesto que el día que debíamos estar en Plymouth a las 14:30 para embarcar lo teníamos que comenzar cogiendo un avión en Edimburgo a las 6:25 con destino a Gatwick (que aunque lo parezca no es Londres). Nos despedimos allí de nuestras niñas, a las que no veríamos a la vuelta, puesto que se iban a ir de vacaciones a Mundaka (Vizcaya, España). Y es que a los bretones les encanta ir al País Vasco español, donde les tratan muy bien gracias a una extraña solidaridad que no reproduce la tozuda realidad: Incluso la minoría bretona que utiliza el bretón como lengua común (alrededor de unos 300.000), idioma del mismo tronco del gaélico, y prácticamente idéntico del propio del país de Gales, no está en absoluto interesada con la independencia, se sienten tan franceses como cualquier otro francés si bien se sienten maltratados por Paris ( y algo de razón tienen).




Estas dos imagenes de Roscoff dejan manifistamente claro que esta ciudad pertenece a Bretaña al no detectarse ningún anuncio de Gazprom , entidad que detenta el poder real en la actual Federación Rusa, y que acaba de dejar al mundo mundial un nítido aviso de quien es el que manda en los recursos energéticos del Asia central.

Después de una relajada travesía nocturna, que pasamos durmiendo como angelitos, desembarcamos por fin, a eso de las 7:00 (hora de ellos ) , en la pérfida Albión.

Oh the night fell black and the rifles' crack Made perfidious Abion reel.

El viaje para la próxima entrega.

4 comentarios:

Freia dijo...

Jajajaja Bolche. Su vehemencia en el discurso contra algunos tirios y no pocos troyanos hace que no se libre ni del idioma de Shakespeare...

Hombre por diox, por diox, por diox. Que tampoco la cosa es como Vd. la cuenta. Jajaja.
Besos gordos.
PD: Aquí me tienes enganchada como una tonta al serial. Y anda que no quedan capítulos... Con lo fácil que te habría sido invitar a unas cañas y contármelo... Pago yo... aaaanda

Freia dijo...

del, no. El, el, el idioma de Shakespeare.

Osaposa dijo...

Sobre Roscof, no tengo nada que decir, pues solo vi el embarcadero, y curante mucho tiempo, pues Sandrine nos dejo despues de comer y hasta las 11,30 no partiamos hacia la Gran Bretaña, como llevabamos equipaje le deje a mi bien amado esposo que pasease un poquito y me converti en cancerbero de las maletas, para estas cosas salgo siempre preparada por aquello de mi posible inmovilidad, con novelones y Quiz varios y diversos, que como vereis mas adelante nos hicieron mucha compañia.

Pues si, despues de un placentero sueño, para mi, que no para Bolche, y un desayuno agradable viendo el mar de madrugada, pero de dia, llegamos al Reino Unido, cogimos el tren y por fin en Londinum (de mi amado Asterix).

Como comenta el colega, es retroceder 50 años en el tunel del tiempo para algunas cosas, el no conocia esta gran ciudad (lo de gran va por el tamaño), yo he ido varias veces a lo largo de 30 años y he permanecido grandes meses en ella.

El retroceso tiene sus ventajas y sus desventajas, las primeras ese amor endogamico a cuidar sus cosas, costumbres y tradiciones, algunas creadas ad hoc para el turismo; sobre las segundas el colonialismo linguistico que padecemos, que hace que tengamos que leer algunas cosas con diversos diccionarios a nuestro alrededor, y que pensemos que somos idiotas por no entender el nuevo español que admite mucho anglicismos como propios, de este colonialismo viene eso de que sus primos se declaren "Padres y defensores del mundo".

Pero a pesar de que a mi chico esto le parecio estupendo, yo que conocia bien Londres, me desilusione un poco por aquello de la "globalizacion", de pronto descubri una ciudad anodina, igual que todas las demas, con los mismos hitos referenciales, que habia perdido mucha identidad, con unos precios que te procucian la negacion de usas los WC's, por aquello de evitar comer, vamos que cuando a mi me costaba la libra 250 ptas., era mas barato que ahora.

Menos mal que habia elegido un hotel en una de las mejores zonas residenciales de Londres, poco afectada por la dichosa globalizacion.

Tambien a mi la primera vez que fui, me parecio que los perros estaban drogados, por aquello de respetar incluso señales viales en el suelo, yo he tenido perro toda la vida y me las he visto y deseado para llevarlos de un sitio a otro, y por supuesto si han encontrado algo apetecible, aunque fuera simplemente para jugar, la unica tecnica para impedirselo era y es sujetar la correa abrazada a un arbol, estos otros son muy señoritos y educados hasta en sus necesidades escatologicas, sabia que a mi amado esto le dejaria flipado, el con sus flipes y yo con mis mapas, que para eso estudie geografria y urbanismo.

Bueno corto que este chico trabaja muchisimo y va por el capitulo tatantos y yo no doy mas de si ni de no.

Besos

Osaposa dijo...

Sobre Roscof, no tengo nada que decir, pues solo vi el embarcadero, y curante mucho tiempo, pues Sandrine nos dejo despues de comer y hasta las 11,30 no partiamos hacia la Gran Bretaña, como llevabamos equipaje le deje a mi bien amado esposo que pasease un poquito y me converti en cancerbero de las maletas, para estas cosas salgo siempre preparada por aquello de mi posible inmovilidad, con novelones y Quiz varios y diversos, que como vereis mas adelante nos hicieron mucha compañia.

Pues si, despues de un placentero sueño, para mi, que no para Bolche, y un desayuno agradable viendo el mar de madrugada, pero de dia, llegamos al Reino Unido, cogimos el tren y por fin en Londinum (de mi amado Asterix).

Como comenta el colega, es retroceder 50 años en el tunel del tiempo para algunas cosas, el no conocia esta gran ciudad (lo de gran va por el tamaño), yo he ido varias veces a lo largo de 30 años y he permanecido grandes meses en ella.

El retroceso tiene sus ventajas y sus desventajas, las primeras ese amor endogamico a cuidar sus cosas, costumbres y tradiciones, algunas creadas ad hoc para el turismo; sobre las segundas el colonialismo linguistico que padecemos, que hace que tengamos que leer algunas cosas con diversos diccionarios a nuestro alrededor, y que pensemos que somos idiotas por no entender el nuevo español que admite mucho anglicismos como propios, de este colonialismo viene eso de que sus primos se declaren "Padres y defensores del mundo".

Pero a pesar de que a mi chico esto le parecio estupendo, yo que conocia bien Londres, me desilusione un poco por aquello de la "globalizacion", de pronto descubri una ciudad anodina, igual que todas las demas, con los mismos hitos referenciales, que habia perdido mucha identidad, con unos precios que te procucian la negacion de usas los WC's, por aquello de evitar comer, vamos que cuando a mi me costaba la libra 250 ptas., era mas barato que ahora.

Menos mal que habia elegido un hotel en una de las mejores zonas residenciales de Londres, poco afectada por la dichosa globalizacion.

Tambien a mi la primera vez que fui, me parecio que los perros estaban drogados, por aquello de respetar incluso señales viales en el suelo, yo he tenido perro toda la vida y me las he visto y deseado para llevarlos de un sitio a otro, y por supuesto si han encontrado algo apetecible, aunque fuera simplemente para jugar, la unica tecnica para impedirselo era y es sujetar la correa abrazada a un arbol, estos otros son muy señoritos y educados hasta en sus necesidades escatologicas, sabia que a mi amado esto le dejaria flipado, el con sus flipes y yo con mis mapas, que para eso estudie geografria y urbanismo.

Bueno corto que este chico trabaja muchisimo y va por el capitulo tatantos y yo no doy mas de si ni de no.

Besos