Completas

Tras las Vísperas vienen las Completas, y con ellas la reflexión. Reflexión que a mí, por encima de todo militante comunista, me deja un sabor agridulce, aunque, porque negarlo, con muchos más matices positivos y agradables en el paladar que el regusto amargo que me ha producido al paso de la garganta el mal trago de comprobar el estado de extrema debilidad en que se encuentra mi partido, el PCE, o al menos su federación madrileña el PCM.
No me cabe la menor duda de que todos tenemos un ego que alimentar y mantener, y en este sentido el mío ha quedado satisfecho, el que este aspirante a aprendiz de bolchevique haya sido elegido, con el pseudónimo de Javier García Centeno, para formar parte del Consejo Político Regional, no me deja indiferente. Y lo paradójico ha sido que el hecho de de que haya habido una lista única no ha facilitado mi elección, más bien lo contrario. A nadie que haya leido , inexplicablemente, en alguna ocasión, lo que escribo se le escapa el hecho, entre otras cosas porque yo no lo oculto, de que me alineo con el sector más crítico hacia la dirección regional saliente, los que apoyamos en el proceso que nos llevo a la IX Asamblea Federal el llamado documento de los cien, en definitiva los partidarios de la elección de Cayo Lara. Este sector, que en Madrid nos autodenominamos, un tanto pomposamente, la pluralidad , ha estado en este proceso preasambleario, dividido, se podría resumir que , aunque esto es mucho simplificar, entre los partidarios de aceptar la oferta de la mayoría e integrarse en una única lista y los partidarios de conformar una lista alternativa. Desde mi posición personal, y en esta bitácora el que esto escribe y suscribe hace reflexiones personales que no pretenden ni vencer ni convencer, cualquiera de las dos posiciones tenía argumentos políticos de peso. Los partidarios de integrarse en una lista única han argumentado en dos direcciones: la primera, que a mi sinceramente no me convence, en el sentido de que participando de forma activa en la dirección, y ocupando alguna secretaría de peso, podrían abordarse algunas cuestiones de extraordinaria importancia, referidas fundamentalmente a aspectos de refundación interna: censos inflados, compañeros apartados o expulsados, etc; la segunda, que sí tiene, a mi juicio, un importantísimo contenido político, circula en el sentido de presentarnos ante los ciudadanos como un movimiento político y social suficientemente cohesionado y unido como para ser capaz de encabezar y dar una respuesta a la crisis, movilizadora y combativa, alejada de propuestas reformadoras de un sistema profundamente herido, en su aspecto estructural, pero ni mucho menos muerto, esta es la línea, y así lo manifestó en su intervención Cayo ,preferida por la dirección federal de IU. Los partidarios de una lista alternativa, consideraban, y es igualmente un argumento, siempre a mi juicio, legítimo y de peso, que sin llegar a acuerdos importantes en lo que se refiere a democracia interna, en cuestiones referidas a la elección de candidatos, a la estructura de Madrid ciudad, y aquí conviene recordar que el elegido como cabeza de lista al Ayuntamiento de Madrid no era exactamente el mismo, o la misma, que habían preferido las asambleas de los distintos distritos de Madrid, y sobre todo en cuestiones tendentes a reflejar en IUCM lo acordado, de forma casi unánime, en nuestra IX Asamblea federal, anticapitalismo, republicanismo, etc, el participar en esa lista única podía dar la sensación de que avalaba políticas de la dirección saliente con las que no se estaba en absoluto de acuerdo. Además una lista alternativa hubiera podido visualizar de forma incontestable no soló cuantos éramos sino también quienes eramos y presentar una alternativa visible, con nombre y apellidos. No me importa reiterar, y lo haré cuantas veces haga falta, que ambas posiciones tenían un importante peso político, que ambas eran legítimas y que ambas, y esto es importante, propugnaban el continuar manteniendo las mismas posiciones políticas que se han venido manteniendo hasta ahora. El órgano regular del PCM, su Comité Central, decidió decantarse por esta segunda opción, sin embargo esta postura quedó en minoría en el conjunto de la pluralidad tras votación celebrada en urna en la interrupción, para comer, del sábado 28. A pesar de que, antes de esa votación, yo ya había prestado, junto con los delegados que pertenecían a la agrupación de Villaba del PCE, el aval para una posible candidatura alternativa, y que en la votación, y en coherencia con la disciplina que voluntariamente asumo al ser militante del PCE, me incliné por la lista alternativa, el resultado de la votación dejó muy claro, a pesar de lo ajustado del mismo, que la lista única de integración era el único camino viable. Mi situación política se tornó en triplemente minoritaria:
En primer lugar, de entrada siempre me he encontrado entre la pluralidad, minoría en IUCM. Dentro de esa pluralidad, en la minoría que, disciplinadamente insisto, ha defendido lo acordado por el Comité Central del PCM. Y dentro de esta minoría, minoritario a su vez, al sostener que defender numantinamente la lista alternativa equivalía a un suicidio político. Con todo, sólo cuando el secretario general del PCM, que para mi tiene la autoridad política que le confiere su cargo, y que en mi esquema militante es mucha, me anunció la renuncia a la lista alternativa, y sólo en ese momento, me sentí cómodo perteneciendo a la lista única. Es el incoveniente de intentar ser coherente con lo que uno piensa y con su su concepto de lo que debe ser un militante comunista. La ventaja estriba en que esta noche he dormido de puta madre , perdóneseme la expresión, que más que del teclado me ha salido de las entrañas.
Tres conclusiones extraigo, de momento:
-Aquellos que pensaban, y muchos siguen pensando, que el documento de los cien era un ardid del PCE para atraer incautos bienintecionados, tienen un olfato político digno de una ameba o un paramecio.
-Aquellos que nos acusan, a los comunistas, de ser poco respetuosos con los usos democráticos, debería, a su vez, reflexionar. Nuestra postura, renunciando a presentar candidatura, una vez constatado que dentro de la pluralidad eramos minoría, ha sido impecablemente democrática, por más que haya habido quien interesadamente haya filtrado que "la candidatura impulsada por Juan Ramón Sanz no obtuvo suficientes avales ". En ningún momento el secretario general del PCM encabezó lista alguna. La lista alternativa, aprobada por el pleno ampliado del CC del PCM, celebrado el miércoles 25 de marzo, estaba encabezada por otra compañera y camarada, cuyo nombre no voy a desvelar.
-A nadie puede ocultársele que la situación del PCM es angustiosa, que miembros, y miembros destacados del CC del PCM actúen en contra de las decisiones adoptadas, es para mi de extrema gravedad, pero no es esta bitácora el lugar adecuado. Solo me permito anunciar, sin querer amenazar a nadie, que en los lugares donde orgánicamente corresponde la voz de este aspirante a aprendiz de bolchevique, va a sonar alta y clara, y va a exigir responsabilidades, y no en único sentido. Hay más de un responsable en este deterioro, y yo no soy uno de ellos. No hace falta ser un lince, especie protegida, para deducir que es este el aspecto que me ha producido amargura en el proceso.
Una vez saldadas las cuentas conmigo mismo, tengo que, en atención al título de entrada, completar mi reflexiones intentando objetivarlas al máximo. No creo ser nunca triunfalista, y no lo soy ahora al mostrarme positivamente esperanzado, del desarrollo de la Asamblea, lo cual con mi tendencia natural a constituirme en minoría, incluso dentro de la minoría más minoritaria, no es poco. Que me hubiera gustado que mis tesis políticas hubieran triunfado es obvio, que los documentos y declaraciones yo los hubiera redactado de otra manera, más obvio si cabe. Que me hubiera encantado que la refundación ,tanto interior como exterior, hubiera empezado desde ya.
Pero vamos a lo positivo, al espíritu de construcción que parece que hemos adoptado, a las muchas caras nuevas que se ven en el CPR, y sobre todo a ese mensaje de movilización, combate y sacrifico que nos dejó Cayo Lara, mensaje que comenzo con una cita de Thomas Jefferson, recordándonos el cáracter de ave rapaz que tiene un banco por el hecho de serlo, y del que destacaría, entre otros párrafos que definitivamente llegaron a emocionarame, la sencilla clase de economía que nos dió y que voy a intentar citar textualmente:
El precio de la vivienda lo constituye el valor del suelo, y el de los ladrillos, y el de los albañiles, y el de los electristas, y el de..., lo demás es especulación y robo.
Con estos mensajes hay que salir a la calle, para transmitirles a los trabajadores, y a los ciudadanos en general, que hay que plantarle cara al sistema capitalista, y que con ellos va a estar IU, una IU cohesionada, aunque siempre plural, porque la izquierda, en su conjunto, debe ser necesariamente plural. En esta asamblea he palpado músculo y he sentido las ganas de decir ¡basta!. Y ha quedado claro, ya lo quedó en la IX Asamblea Federal, que la izquierda política está fundamentalmente en IU, porque en IU cabemos todos, todos los de izquierda, claro. Lo del PSOE es otra cosa, que ni siquiera ellos saben muy bien que es.