Ayer, aproximadamente, sobre las ocho de la tarde se presentó la ignominiosa candidatura de los rojos masones de siempre, esta vez se presentan bajo el nombre de Izquierda Unida-Los Verdes, pero sabemos perfectamente quienes son, son los que amparan que a de Juana Chaos se le aplique la ley vigente, y no otra, son los que mantienen que el atentado del 11-M fue obra de
Al-Qaeda, como el repugnante juez instructor del Olmo, como resultará las conclusiones del juicio-farsa que se está celebrando, y no de ETA en colaboración con Rubalcaba, y es más, y si acaso más importante, son los que se oponen al precioso PGOU que elaboró el
Pp de Alpedrete, un más que bonito plan que iba a poblar nuestro precioso de municipio de miles de casitas unifamiliares (individuales, pareadas y adosadas) y comunitarias. Yo jugué mucho de pequeño con el
Exin-blok (antecedente del
Exin-Castillos ) , hice cientos, puede que miles de casas, y jamás, en mi candor infantil, me preocupé de que los posibles habitantes de aquellas preciosidades tuvieran que consumir agua y electricidad, pretendieran llevar a sus hijos al colegio, necesitaran acudir al médico cuando estuvieran enfermos. Es el mismo candor que tienen los honrados constructores de Alpedrete que, deseando dejar un espectacular municipio, no se han preocupado que, esos que quieren frenar el crecimiento del municipio, han llamado servicios públicos esenciales. Como van a ser esenciales, si tenemos al lado a Villalba que nos cubre todo. Y esa manía que les ha dado ahora por el medio ambiente, si es todo mentira, si lo del cambio climático es una mentira más de los rojos que no quieren que progresemos, bien que lo denuncia Federico en la COPE (lo juro, que lo he oido yo). Pues ahí estaban esos malvados, y para que se viera que son todos iguales, sin ocultarse estaban presentes el candidato del PSOE, Juan Aragoneses y otros compañeros. Para disimular luego, en las intervenciones, se metieron un poco con el PSOE, acusándole de practicar la misma política económica que practicó Rodrigo Rato, pero nada importante. Luego irán todos juntos a intentar derrotar a la alcaldesa, esa mujer que nos considera como hijos, o lo que es lo mismo hijos de ..... la alcaldesa. Que manera de meterse con tan magnífica mujer. Intervinieron, por este orden Fernando Jiménez, conocido radical del pueblo, Fernando Cabal, que quiere hacerse pasar por Verde cuando sabemos que es un rojo más, y Stuart Linares, candidato a alcalde, que intentó ser más moderado, pero ¿que moderación cabe en este grupo de chequistas proetarras? Lo hicieron en la sidreria
El Abuelo, una conocida tasca de Alpedrete que frecuenta el rojerío local. Hay colgando en la pared un retrato de Francisco Rabal, convecino de Alpedrete ya fallecido, de conocida ideología comunista, y al que la magnanimidad de la alcaldesa ha concedido una plaza. Lo hicieron allí, y no en la Casa de la Cultura, sita precisamente en la plaza Paco Rabal, porque, con buen criterio, la corporación municipal no deja el centro cultural para este tipo de actos. Si la semana pasada se pudo celebrar allí un acto del
Pp, anunciado por
error como un acto de la Corporación Municipal, se debió a que era de
interés municipal con la presencia del consejero Lamela. No vamos a comparar, ¡A ver si vamos a ser todos iguales! Los intervinientes llegaron a criticar a la alcaldesa por no cumplir sus promesas electorales de 2003, como si los programas estuvieran para cumplirse. La criticaron igualmente por su escaso respeto a la libertad de expresión, teniendo como tiene en su despacho, esto es verdad de la
fetén, un retrato de ese adalid de la libertad en las ondas que es
Fedeguico el glande. Pues bien estos
sin -Dios, estos
anti-Patrias han convocado actos a favor de la libertad de expresión
Pero si no mandó a la Guardia Civil, ni siquiera a la Policía Local, para meter en cintura a esos desaprensivos. Llegaron a homenajear a Guillermo Elvira, que a sus 87 años sigue tan rojo como siempre. Mira que se ha llevado palos este hombre y sigue erre que erre. Echaron en cara a la alcaldesa, no debieron tener bastante con el reconocimiento a Paco Rabal, que se negara cualquier clase de homenaje, aunque fuera mediante una humilde placa, a un hijo de Alpedrete muerto en 1941 en Mauthaüsen, algo habría hecho para estar ahí, digo yo. Además había que otorgarle placa y plaza a Vicente Guillen Zamorano, alcalde franquista de Alpedrete, y padre de nuestro actual concejal del mismo nombre.
Nuestro invicto Caudillo, nos miraba desde su eterna morada, labrada con alpedreteña piedra, un poco preocupado por los acontecimientos. No se preocupe mi general, Marisol sigue al pie del cañón, haciendo guardia bajos los luceros, impasible el ademán, pendiente de nuestro afán. Como siempre.
3 comentarios:
No le quiero quitar la ilusión, pero cuidado que algún Verde puede desteñir. En Rivas conocemos alguno. Mucha suerte para esa panda de impíos masones y comunistas que se han juntao para quitarle la silla a esa pobre alcaldesa que lo único que quiere es hacer progresar a Alpedrete con más y más y más casitas.
SAlud y República
Ríndase, y emigre a Rivas.
Gracias por los ánimos e invitaciones, conozco bien Rivas, mi hermano fue el primer presidente de COVIBAR, allá por los años 80, y alguna envidia tengo, a que negarlo. Pero lo mío es como lo de los misioneros en tierra de infieles, aspiramos a que Alpedrete se convierta en el Rivas ( o San Fernando) de la sierra de Guadarrama.
Salud y República (Serrana como el jamón)
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